Los ejecutivos de la filial aseguran que jamás formaron parte de alguna operación de concentración económica y apelaron la resolución que los obligaba a vender su participación en Telecom Argentina.
Así es señoras y señores, pese a las idas y vueltas, obligación de desalojo y todo lo que se generó en esta novela, Telecom Italia apeló la resolución de la Secretaría de Comercio Interior que los obligaba a vender su participación dentro de Sofora, la empresa controlante de Telecom de Argentina.
En el escrito presentado ante la CNDC, TI acusó a la administración de Guillermo Moreno de haber demorado la notificación de esa resolución –presentada a finales de agosto- hasta mediados de esta semana, a pesar de que establece que la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia dispone de 60 días para determinar cómo se debe llevar a cabo el proceso de desinversión.
En el escrito Telecom Italia asegura que la compañía “no ha sido parte de la mencionada operación de concentración económica” por la cual Telefónica de España ingresó en el control Telecom de Italia y que dio lugar a la investigación por supuesta concentración por parte de la CNDC.
“Ni la Secretaría de Comercio Interior ni la CNDC han notificado la Resolución 483 aún cuando tal notificación era inexcusable en atención a que esa resolución afecta notoriamente los derechos y patrimonio” de la compañía.
“Por esta razón, esta parte recién pudo advertir los gravosos términos de la Resolución 483 luego de haber tomado vista del Expediente de la CNDC con fecha 15 de Septiembre de 2009”, es decir, a mediados de esta semana.
La compañía señala que la decisión del Gobierno “condiciona la aprobación de una operación de supuesta concentración económica de la que Telecom de Italia no fue parte”, a que la compañía “se desprenda de manera efectiva e irrevocable de la totalidad de su participación accionaria y derechos en Sofora”.
Para Telecom, la Resolución 483 además es “arbitraria” porque condiciona la aprobación de una “supuesta” operación de concentración económica “a la venta de todos los activos” que posee en el país “sin considerar que transcurridos casi dos años desde que se celebró la supuesta operación de concentración económica (el ingreso de Telefónica en Telecom Italia fue a principios de 2008)”.
El texto finaliza diciendo que transcurrido ese período “ninguna afectación real y concreta ha existido en el mercado de las telecomunicaciones argentino”.
¿Cómo seguirá esta historia? ¿Qué pasará con la jugada que quiere hacer el Gobierno con Carlos Slim?