Hace ya unos años desde que la taiwanesa MSI ha decidido apostar de lleno al creciente mercado gamer. Hoy por hoy poseen, bajo el branding de G series una amplia gama de productos diseñados exclusivamente para los entusiastas de los videojuegos que van desde motherboards y placas de video, hasta All in Ones y notebooks.
En esta oportunidad, la gente de MSI nos cedió por un tiempo uno de sus productos estrella, la GS70 Stealth Pro, para poder testearla en exclusiva para RedUSERS. Acá les dejamos nuestras impresiones.
Diseño
Lo primero que se destaca de un equipo premium, es obviamente el diseño y los materiales con los que está construido. Y desde luego, la GS70 no es la excepción. En el ámbito de las notebooks gamers, en general acostumbramos ver equipos que nunca describiríamos como convenientes ni cómodas. Después de todo, por el potente hardware que requieren, necesitan muchos más componentes para poder disipar el calor generado. Con esto debían convivir los gamers que llevan sus equipos consigo. Uno de los primeros que vio una gran posibilidad de mercado fue Razer, que respondió presentando la Razer Blade, lo que en un principio fue un concepto de portátil ultra delgada diseñada para gamers. La idea no tardó en explotar, y obviamente, el resto de los jugadores no quisieron quedarse sentados mientras Razer sacaba las ganancias. Asi fue como MSI presentó en Agosto del año pasado la GS70, la notebook gamer de 17” más delgada del mundo.
La Stealth que probamos en esta oportunidad, es una versión mejorada de la que fue lanzada en aquel entonces, pero mantiene el mismo diseño básico. Por fuera, sus medidas son 41,8 x 28,7 cm con un espesor de tan solo 2,2 cm; lo cual teniendo en cuenta el hardware del equipo, es realmente sorprendente. La GS70 está construida enteramente en aluminio, a excepción de un pequeño borde en la parte trasera superior de la pantalla, el cuál es de plástico. El metal es lo que hace que este equipo se vea tan bien, pero también es el que hace algo más dificultosa su portabilidad, ya que añade un cierto peso extra, llegando a los 2,6 Kg. De todos modos, el metal es la única elección posible, por varios motivos, en los cuales se incluye la ayuda que provee a la disipación del calor generado por el equipo; y el hecho de que con el valor de mercado que posee, sería inaceptable una construcción de plástico.
La parte superior posee una terminación de aluminio cepillado, ya habitual en productos de alta gama. Allí mismo se encuentra el logo de Gaming Series, el cual se ilumina al encender el equipo. Por debajo, únicamente veremos los orificios de ventilación. Tanto en el lado derecho, como el izquierdo, se localizan las dos salidas de ventilación, por donde es expulsado el aire caliente luego de refrigerar los componentes internos. Esta disposición, se debe al diseño de doble fan (ventilador) que posee el equipo, por el cual se disipa el calor tanto de la GPU como de la CPU por separado. De este modo, cada componente crucial es enfriado de forma independiente.
Algo digno de destacar, es el diseño del teclado. Para ello, MSI delegó la tarea en Steelseries, una empresa dedicada casi exclusivamente al ámbito de periféricos para gamers y reconocida mundialmente por la excelente calidad de sus productos. El formato del teclado es bastante estándar, con teclas de Shift, Ctrl y Enter de tamaño completo, pero un abultamiento algo incómodo de las teclas de navegación y el teclado numérico. Más allá de eso, la distribución que obviamente es de formato Inglés, resulta bastante cómoda. El factor que probablemente más llame la atención, es la retroiluminación RGB, la cual podremos elegir el color, brillos y formas de comportamiento de la misma. Si bien no cambia en nada el aspecto funcional del método de entrada, pero definitivamente va a hacer que algunos den vuelta la cara para ver de donde viene el espectáculo de luces.
Conectividad
Empecemos por analizar los conectores externos. En el lado derecho del equipo, tendremos 2 puertos USB 3.0, junto a un lector de tarjetas SD, el conector de carga y un Kensington lock. En el lateral opuesto, nos encontramos dos puertos adicionales USB 3.0, una entrada de Gigabit Ethernet, conectores de micrófono y auricular; y por último, la exorbitante cantidad de 3 salidas para display, un puerto HDMI y dos puertos mini DisplayPort. Si como nosotros la primera vez que lo leímos alguno se pregunta: ¿Realmente es necesario tanto? Bueno, la respuesta es algo compleja. “Necesario” es una palabra que abarca mucho para el caso, pero definitivamente es interesante. Este equipo, tan portátil y liviano (en comparación con otros de su misma categoría) posee la capacidad de extender el display hasta 3 pantallas adicionales, dando un total de 4 displays Full HD completamente funcionales. Dejando de lado si realmente es útil o necesario, es propio de mención que al menos posea esta capacidad.
Pasando al ambiente de redes, como es de esperar, la GS70 se encuentra equipada con lo último y mejor que se consigue hasta el momento. Así, incorpora Bluetooth 4.0, y una solución de redes desarrollada por Qualcomm conocida como Killer DoubleShot. Esta consiste del puerto ethernet Gigabit del que les comentamos anteriormente y una interfaz Wi-Fi 802.11 AC, actualmente el protocolo más veloz. Killer DoubleShot, además de ser una forma marketinera de venderla, en teoría posee una gran cantidad de funciones para mejorar la latencia y priorizar el flujo de datos de forma inteligente. Básicamente orientado al ámbito gamer, pero que definitivamente tiene usos bastante prácticos en otro tipo de escenarios.
Pantalla
La pantalla en general es un aspecto que muchos fabricantes dejan en el olvido. Por suerte, eso no es un inconveniente cuando hablamos de un equipo de alta gama con énfasis en el mundo gamer. En este caso, la pantalla es uno de los aspectos que más nos gustaron del equipo. Podemos hablar bastante sobre la misma, pero si buscan una conclusión rápida, es espectacular.
Pasando a los aspectos técnicos, estamos ante un panel IPS de 17” con una resolución de 1920×1080, osea, FullHD. Por encima de todo esto, MSI aclama la adición de una cobertura anti-reflejos, que no es para desmerecer, ya que disipa una razonable cantidad de luz, haciendo mucho más clara la imagen. Los ángulos de visión son de lo mejor, ya que no importa de donde mires la pantalla, la imagen se verá de forma correcta y sin ningún tipo de distorsiones en los colores.
La densidad de pixels, en general es algo a tener en cuenta dentro de las notebooks, ya que en muchos casos, hemos visto equipos que poseen pantallas geniales, con resoluciones FullHD, pero dentro de un diámetro muy pequeño, lo que termina resultando en elementos en la pantalla pequeños que pueden tender a cansar la vista más deprisa. Muchos dirán que Windows posee opciones para ajustar el tamaño de los elementos y demás, pero seamos sinceros, realmente no funciona para nada bien. Estas opciones terminan deformando en varios casos cómo se deberían ver las cosas y terminan complicando más de lo que solucionan. Por suerte, dadas las 17” de la pantalla, esta notebook posee casi 130 dpi. Parecerán pocos comparados con lo que acostumbramos a ver en smartphones, pero debemos tener en cuenta que la distancia a la que vemos la pantalla es mucho mayor, por lo que esta densidad se acomoda fácilmente dentro de un rango óptimo para no tener que estrujarnos los ojos para intentar leer algo.
Hardware
Y así finalmente llegamos al aspecto que más nos interesa en una notebook, ya que el hardware lo es casi todo, más inclusive teniendo en cuenta el tipo de usuario para el que está destinado la GS70.
El cerebro tras de Stealth Pro es nada más y nada menos que un Core i7 4700HQ, de 4
núcleos físicos, que gracias a la tecnología Hyper Threading de Intel puede procesar hasta 8 hilos. La frecuencia del mismo es de 2,4 GHz de base y 3,4 GHz con Turbo Boost y posee nada más y nada menos que 6MB de caché. Obviamente, siendo un i7, es de lo mejor dentro de la gama alta móvil de Intel, y gracias a sus proceso de fabricación de 22nm, también es un excelente ahorrador de energía y posee un TDP (thermal design power) de 47W, que lo hace amigable a la hora de disipar el calor que genera.
Pasando a la memoria del sistema, tendremos 16 GB de RAM, en dos módulos de 8GB cada uno con una frecuencia de 1600MHz. Claramente estamos ante lo que es posiblemente uno de los equipos portátiles más potentes del mercado. Todos estos gigas de RAM disponibles permiten que este equipo, no solo sirva para gamers, sino que tiene muy buen potencial para usos más profesionales, que es donde realmente se pueden llegar a aprovechar esta excesiva cantidad de memoria.
Pasando a donde realmente hablamos de potencia para juegos, la GS70 posee en su interior una de las mejores GPU móviles actualmente, una nVidia GeForce GTX870M. Una bestia que aprovecha al máximo la arquitectura Kepler, con 1344 núcleos CUDA y una capacidad de acceso máxima de memoria de hasta 6 GB. En el caso particular de la GS70, viene con un total de 3 GB de GDDR5, aunque existen versiones con 6GB. Esta GPU, realmente excedió nuestras expectativas. Osea, habíamos leído que era potente, pero termina siendo mucho mejor que muchas de desktops que hemos testeado. Pero basta de chácharas, mejor los dejamos con los puntajes de los benchmarks para que tengan una idea de la potencia que estamos hablando en este equipo.
Software
Como en las notebooks, los softwares pre-instalados, son generalmente herramientas que deja el fabricante para hacer más “útil” el equipo sin realmente llegar a ser indispensables ni innovadores, decidimos dedicar este pequeño espacio a hablar un poco sobre algunas de las aplicaciones que controlan algunas de las funciones interesantes del equipo.
Pero primero, lo primero. El equipo viene de fábrica con el último Windows 8.1, obviamente de 64 bits, para aprovechar los 16GB de RAM instalados. No se sorprendan tanto, que sin decir nombres, hemos visto muchos equipos que se venden actualmente en el mercado con 4GB de RAM, pero para ahorrarse unos dólares, instalan versiones de 32 bits.
La primera aplicaciones que queremos destacar, es la encargada del control del asombroso teclado diseñado por Steelseries. Desde Steelseries Engine, podremos controlar absolutamente cada aspecto del teclado. Como vieron más arriba en las imágenes, el teclado posee una retroiluminación completamente configurable, y desde este software, podremos elegir cualquier color que deseemos (RGB). También podremos seleccionar el efecto con el que queremos que se comporten las luces. Así, tendremos una interesante variedad de opciones, como por ejemplo por sector (teclas del lado izquierdo, o derecho y teclado numérico y flechas de navegación), respiración (Alterna entre dos colores sutilmente) estándar, entre otros. Aunque los colores de las luces del teclado parezcan algo interesante, la verdadera potencia de esta aplicación reside en los macros, ya que es posible remapear completamente la funcionalidad de las teclas con perfiles definidos por el usuario. Por ejemplo, podemos hacer que la letra “c” dentro de determinado perfil, en vez de escribir la letra “c” haga cualquier combinación que deseemos, como por ejemplo “Ctrl + c” para copiar fácilmente. Las posibilidades de este tipo de configuraciones son prácticamente ilimitadas, y gracias a que podremos agruparlas en varios perfiles, permite que tengamos flexibilidad absoluta en los usos que le pretendamos dar.
Dentro de la sección de conectividad, comentamos que posee una solución de red llamada Killer DoubleShoot, que estaba optimizada para juegos en línea. La parte de administración de estos componentes, resulta muy potente a la hora de configurar prioridades en la conexión local. Desde Killer Network Manager, podremos realizar todo tipo de ajustes de la red, pero lo interesante radica en la administración de aplicaciones. Dentro de este menú, podremos elegir, no solo una escala de prioridad para cada programa, sino también limitar exactamente el ancho de banda que queremos que utilice. De este modo, por ejemplo, si tenemos un antivirus que descarga actualizaciones de forma regular, podremos limitar el ancho de banda, consiguiendo que nuestro equipo se mantenga protegido, pero al mismo tiempo no reducir la velocidad de otras aplicaciones.
El resto del software incluido, es útil si, pero no lo suficiente como para dedicarle mucho tiempo. MSI nos entrega un menú en overlay que nos da acceso a las configuraciones básicas del equipo, como ajustes de volumen o brillo y activar o desactivar conexiones inalámbricas. Realmente nada del otro mundo, ya que desde Windows 8 eso se realiza fácilmente desde el panel derecho. Por otro lado, tenemos una utilidad de audio bastante potente, donde podremos ajustar los parámetros del sonido, ya sea volumen, bajos, o los innecesarios efectos de sonido que casi nadie usa.
Batería
A estas alturas, luego de describirles los componentes internos y la potencia de este equipo, creemos que no vendrán con muchas esperanzas a la hora de leer la autonomía de la batería. Después de todo, seamos realistas, si una notebook convencional, con hardware de media gama tienen una duración normal de 6 horas, no podemos esperar demasiado de la autonomía de la Stealth Pro. La batería integrada, posee 6 celdas y una capacidad de 5400 mAh. En un uso intensivo del equipo, más particularmente jugando al Battlefield 4, la duración de la batería fue de apenas 50 minutos. Esto, teniendo en cuenta que la configuración de video estaba en Ultra (sin FXAA). Definitivamente, no es de ningún modo apta para jugar utilizando la batería, ya que con tan poca duración, estaríamos desperdiciando preciados ciclos de carga.
Por otra parte, cuando se está haciendo un uso normal y moderado del equipo. El procesador maneja muy bien su frecuencia ajustándose a lo necesario en el momento, y la GPU, por su parte, también regula de muy buena forma su actividad. Gracias a esto, en este tipo de escenario, la notebook consigue otorgar 4 horas y media de uso. Aunque sigue siendo una duración baja para el ritmo de un usuario común, el “target” de este tipo de equipos, ya tiene la idea hecha de que es necesario contar con el cargador a mano en todo momento.
Almacenamiento
“Excesivamente genial” serían las dos palabras que usaríamos para describir el apartado de almacenamiento de la GS70. Sino, juzguenlo por ustedes mismos. El equipo cuenta con un disco rígido convencional WD de 1TB de 5400 RPM. Este disco está pensado para hacer de almacenamiento masivo para nuestros archivos y carpetas más pesadas, ya que para el resto, como el sistema operativo y las aplicaciones que más usemos, tendremos la exorbitante cantidad de tres SSD’s de 120 GB en RAID 0, sumando sus capacidades hasta los 360 GB de almacenamiento super veloz. Lo sorprendente del caso, no es en realidad que tenga esos 3 discos, sino que posea esos 3 slots, que de por cierto, son mSATA, como expansión. Si bien no son los discos más veloces dentro de la gama de estado sólido, ya de por sí por el salto tecnológico dejan en ridículo a cualquier HDD con el que se los compare (en términos de velocidad y tiempos de acceso) con lo cuál los convierten en el ámbito ideal para almacenar esos juegos que tanto amamos pero que al mismo tiempo tanto odiamos esperar a que carguen.
Conclusión
MSI ha logrado crear un producto excepcional, que ya ha sido en diferentes oportunidades merecedor de varios premios dentro de la industria. Desde los materiales de construcción, pasando por la pantalla y los componentes internos, la Stealth Pro es un ejemplo de potencia y exceso, ya que posee especificaciones muy por encima de la media del ámbito gamer y algunos elementos que simplemente son un plus, como los 3 SSD’s o la retroiluminación multicolor del teclado. Aún así, permanece siendo un producto excelente que otorga lo que promete: una experiencia portátil y muy fluida de juego, hasta en los títulos más demandantes de la actualidad. Aunque obviamente, todas estas características no vienen gratis, ya que para adquirir un ejemplar, no solo que deberemos viajar a EEUU u otro país donde se consigan, sino que veremos adelgazar de forma muy repentina nuestra billetera (Se consiguen a partir de U$D 1900 aproximadamente dependiendo de la configuración). Aún así la GS70 es un juguete que muchos de nosotros desearíamos tener.
Ficha técnica
Chipset | Intel® HM87 |
Procesador | Intel Core i7 4700HQ @2,4GHz (3,4 Turbo Boost) |
Memoria RAM | 16GB DDR3 @ 1600MHz |
Almacenamiento | 360 GB SSD (3 SSD’s en RAID 0 mSATA) 1TB SATA (WD 5400 RPM) |
Pantalla | 17” IPS – FullHD (1920×1080) – antireflejos |
GPU | NVidia GeForce GTX870M, 3GB GDDR5 |
Conectividad | Bluetooth 4.0 – Killer DoubleShoot (Gigabit LAN, Wireles AC 802.11 AC – HDMI – 2x Mini DisplayPort – |
Multimedia | WebCam 1080p @30fps – Sonido DynAudio con Audio Boost |
Batería | 6 celdas 5400mAh |
Sistema Operativo | Windows 8.1 – 64 bits |
Precio | a partir de U$D1900 aproximadamente |
Pros
- Excelente performance, incluso en los juegos y aplicaciones más demandantes del momento.
- Pantalla de muy buena calidad y excelentes ángulos de visión.
- Teclado retroiluminado y completamente configurable con macros.
Contras
- Peso algo elevado, lo que dificulta de cierto modo su portabilidad.
- Ruidosa en momentos de uso intensivo.
Puntaje: 9,5