Con motivo del Mundial de Fútbol, Samsung acercó a la redacción de RedUSERS uno de los televisores más potentes de su portfolio: el Samsung UN55ES8000, también denominado Series 8000 de 55 pulgadas. El equipo es –probablemente– el más completo del mercado entre los televisores Full HD (debemos diferenciarlo de los 4K), así que advertimos que esta será una review extensa para describir cada punto destacable del equipo.
Diseño y construcción
A nivel diseño, no hay nada que objetarle a Samsung. A pesar de tener una pantalla de gran porte, el marco es ínfimo y en la zona lateral está formado por metal, lo que le brinda un aspecto distinguido y permite, también, adherir la base metálica de la antena de interiores de la TV digital. Tanto se ha privilegiado el tamaño mínimo del bezel que la marca Samsung tiene aproximadamente una altura de medio centímetro y, para que no pase desapercibida, el fabricante la ilumina al estilo de la manzana que destella en las tapas de las MacBooks. El soporte del televisor está compuesto por una base semicircular también cromada, con dos patas de igual tono. Una buena elección ya que se camufla con el resto de la decoración al reflejar otros elementos cercanos. Al fin y al cabo, este minimalismo sólo tiene como fin destacar la enorme pantalla de 55 pulgadas.
Curiosamente, sobre el display, no hay mucho para decir. Es posible ver la imagen desde varios ángulos sin pérdida de calidad y las características de los colores es muy real. Sí hay que destacar los motores de procesamiento gráfico, que hacen el upscalling a Full-HD de contenidos no preparados para esa resolución de una manera sorprendente. Los presets o “escenas” disponibles para ajustar la imagen funcionan de manera correcta, pero los mejores resultados los obtuvimos configurando manualmente el brillo, contraste, etcétera. Por su parte, el audio de este televisor tiene un gran resalte de los tonos graves y no decepciona.
Siguiendo con el tema de la decoración hay que mencionar que todas las conexiones están escondidas detrás de una tapa en el panel posterior del televisor: los puertos HDMI, los conectores USB, las entradas de antena (una para el cable y otra para aire) y el puerto Ethernet (aunque integra conexión Wi-Fi). Esto es ideal para los fanáticos del orden, que no desean cables ni conectores a la vista. Pero juega en contra a quienes utilicen frecuentemente los conectores. Un ejemplo simple: es algo engorroso tener que desarmar este panel posterior, especialmente si el equipo está muy cerca de la pared o sujeto por un soporte de pared, cuando se deseen leer un pendrive o conectar una cámara. En estos casos, será más cómodo remover esa tapa. Acertadamente, los conectores USB se encuentran en el costado del televisor, mientras que otras conexiones (antenas, HDMI, puertos de sonido y video) apuntan hacia abajo.
En el panel posterior también se encuentra el Evolution Kit, que es una especie de set-top-box integrado al televisor que maneja el hardware y el software del equipo. Este componente se puede remover en el futuro y colocar una versión más nueva, para actualizar ciertas funcionalidades del televisor (por ejemplo, nuevos motores gráficos, formatos de videos compatibles, sistema operativo, etcétera) utilizando la misma pantalla. Este concepto “modular” garantiza que la “inversión” en este televisor está asegurada por los próximos tres años en cuestiones de software.
Finalmente, hay que destacar cómo se ha resuelto la inclusión de la cámara en este televisor. Como se trata de un extra que gran parte de los usuarios utilizará de manera esporádica –por ejemplo, una charla por Skype–, Samsung ha decidido que no forme parte del diseño general del equipo. Por lo tanto, la cámara está incluida en borde superior de la pantalla, pero escondida: hay que pulsarla para que salga de su compartimento. Este sistema retráctil permite que se deslice hasta quedar por encima de la pantalla.
Controles
Este televisor es uno de los que ofrece mayor cantidad de formas de manejar las funciones. El control inteligente provisto por defecto es muy pequeño y fácilmente maniobrable, pero no busquemos el clásico teclado numeral, ni los botones para controlar la reproducción ([Play], [Pause] y [Stop]. En su lugar, hallaremos un touchpad, que mencionaremos más adelante en este mismo apartado.
Entre los botones “clásicos” que si están disponibles se destacan las doble teclas (para subir y bajar) de volumen y de canales. Este último funciona muy rápidamente, por lo que al mantenerlo presionado el “contador” de canales se moverá raudamente, haciendo que nos olvidemos –al menos, por un instante– de la falta de la botonera de números. También la carga de canales de manera más veloz que en la mayoría de los otros televisores revisados en RedUSERS Labs, especialmente, si los comparamos con marcas menos “tradicionales” en la fabricación de smart TV.
Lo malo del sintonizador es que Samsung no “integra” los canales de cable con los de televisión por aire (analógica/digital). Al tratarlos por separado, deberemos ingresar al panel de configuración y cambiar el modo antena de cable por digital o viceversa. Un problema menor, pero que fue mejor resuelto por otras marcas que permiten cambiar directamente entre canales de cable y de aire sin cambiar de antena, más teniendo en cuenta que en la Argentina existen algunos canales adicionales por televisor digital (TDA). De hecho, probamos este equipo adhiriendo una pequeña antena de interiores al borde metálico del televisor y la TDA se sintonizó sin inconvenientes en Full HD.
Con respecto a la falta de botones, Samsung ofrece el botón [More], que muestra en un control remoto en pantalla, que tiene la forma de un cubo donde cada cara tiene un set distinto de teclas. Cada una de estas caras se puede navegar con el touchpad, del mismo modo en que se lo hace en una notebook: deslizándose en las cuatro direcciones y pulsando para ingresar una opción. El teclado numérico permite cambiar los canales ingresando el número de canal, pero también navegar las últimas señales sintonizadas. La siguiente cara del cubo ofrece los controles de reproducción de videos, además de los botones de colores rojo, verde, amarillo y azul que pueden usarse en aplicaciones (por ejemplo, Netflix). La última cara ofrece accesos directos a otras funciones, como el manual “digital” del equipo, el navegador de Internet, etcétera.
Para muchos usuarios, este control compacto puede parecer incómodo. No se preocupen: es posible setear un control remoto universal mediante un asistente que incluye el televisor en el menú de configuración. De hecho, hemos configurado una tablet con puerto de infrarrojos y funcionó a la perfección. La otra opción es utilizar DLNA, mediante la aplicación Smart TV Remote, disponible para teléfonos y tablets con Android. Aquí, el único requisito es que tanto el dispositivo móvil como el televisor estén conectados a Internet mediante el mismo router.
Otra manera de controlar las funciones del televisor es mediante controles de voz. El control remoto ofrece el botón [Voice], que al mantenerlo presionado admitirá el dictado de comandos y funciona de una manera muy aceitada: en nuestras pruebas y sin ninguna configuración previa, fuimos capaces de indicar que se incremente y decrezca el volumen, así como cambiar canales hacia arriba y hacia abajo.
Pero otra de las posibilidades es utilizar comandos por movimientos. Por extraño que esto parezca, este equipo ofrece la posibilidad de realizar acciones moviendo las manos al estilo de Kinect, una funcionalidad que cumplió nuestras expectativas durante las numerosas pruebas que efectuamos. Luego de un asistente de configuración y teniendo la cámara desplegada, con sólo saludar con la mano a la pantalla se podrán activar estos comandos. En la zona superior derecha se mostrarán algunos iconos “especiales”, como el acceso al SmartHub (intefaz de Smart TV de Samsung), el Historial, Control remoto en pantalla, Origen (TV, HDMI, USB, etc) y el botón de apagado. En los dos costados se mostrarán los botones más frecuentes: subir y bajar el volumen (además del Mute), sobre la izquierda; y cambiar hacia y abajo los canales, sobre la derecha.
El modo de uso es bastante sencillo. Con sólo mover la mano abierta (con los dedos desplegados) sobre la pantalla se desplazará el puntero del mouse a lo largo de la pantalla, mientras que cerrando la mano en forma de puño se hará clic. Si ingresamos en el SmartHub, podremos usar una función adicional: haciendo el gesto de pasar de página hacia la derecha o hacia la izquierda, se podrá cambiar de pantalla. Se trata de una función muy interesante, ya que permite prescindir del control remoto. Pero no es tan sencilla de utilizar, requiere cierta maña y es posible que el brazo quede acalambrado en caso de querer bajar demasiado de canal 🙂
Un párrafo aparte merece el botón de encendido, “escondido” en el panel trasero del equipo, en el sector inferior-derecho, para seguir la línea de minimalismo (al menos en el frente del equipo) propuesta por Samsung. Además de encender y apagar el equipo al mantenerla presionada, la tecla funciona como una especie de joypad, que se puede mover hacia los costados para ingresar en las opciones básicas sin la ayuda del control remoto. Si bien puede ser algo incómodo si se posee el televisor en un lugar donde no sobre espacio a los costados, es una solución curiosa y a la vez efectiva de no contar con botones en el frente.
SmartTV, 3D y Extras
Uno de los aspectos más logrados del equipo es, sin dudas, sus funcionalidades “inteligentes”. Como es común en estos equipos, un botón dedicado nos llevará a la interfaz de smart TV (Samsung la llama SmartHub), cuya primera pantalla es [Aplicaciones]. Una vez allí, nos apabullará la cantidad de apps disponibles. Veremos una miniatura de lo que sintonice la TV y, a su derecha, las seis aplicaciones recomendadas. Debajo, veremos una grilla de tres filas por diez columnas con aplicaciones, además de una leyenda que nos indicará si hay más instaladas, las cuales se podrán acceder yendo hacia abajo.
Una de las aplicaciones preinstaladas y la primera de la lista es el navegador de Internet. Sus funcionalidades son idénticas al de un browser de escritorio, con la posibilidad de abrir nuevas pestañas, guardar favoritos, hacer zoom etcétera. Como característica adicional, se puede usar el Picture en Picture para ver en una pequeña ventana lo que ocurra en el último canal de TV sintonizado y así navegar con total comodidad mientras se mira de reojo si nuestro programa favorito ya comenzó, por ejemplo.
Con respecto a la navegación, es posible abrir el teclado en pantalla para poder escribir rápidamente una URL, mientras que el touchpad del remoto nos permitirá desplazar el cursor. Si el browser será una de nuestras aplicaciones más frecuentes, lo más cómodo será contar con un teclado y un mouse Bluetooth, ya que desde el panel de control se podrán configurar estos dispositivos inalámbricos.
El televisor cuenta con las apps frecuentes en un smart TV, como Netflix, Twitter, Facebook, YouTube, Vimeo, Skype, etc. En el caso de este equipo, dirigido a los usuarios argentinos, hay aplicaciones localizadas como Todo Noticias, Infobae, Vorterix, Guía Oleo y Hoyts Cines. Pero es posible instalar más gracias al extenso catálogo de Samsung Apps.
Otras de las funciones destacadas de este smart TV es su soporte para contenidos en 3D. El televisor es capaz de reproducir archivos de video tridimensionales (además de contenidos a través de HDMI) y su motor gráfico funciona a la perfección. En el caso de hacerlo mediante archivos, notaremos que éstos tardarán alrededor de cinco minutos en procesarse antes de comenzar a ver las imágenes en 3D. Aunque el equipo no es capaz de pasar al modo tridimensional de manera automática: mostrará dos videos pequeños, uno arriba del otro, correspondientes a cada ojo.
Para activar el modo 3D habrá que pulsar el botón correspondiente en el control remoto y utilizar las gafas (se incluyen cuatro). En este punto, hay que criticar que se trata del tipo “activas”, es decir, que utilizan una pila (de las redondas) que se ubica delante del apoyo de la nariz. Estos lentes son más pesados que otros modelos y hay que adquirir estas baterías una vez que se agoten, pues no son recargables. Por ello se extrañan los anteojos shutter-free, que no parpadean y consiguen el mismo efecto, además de que son menos propensas a generar mareos en ciertos usuarios.
Nobleza obliga, debemos resaltar que no notamos ningún “efecto colateral” en el uso de estos anteojos y hasta pudimos probarlos usando también lentes recetados (quien escribe sufre de miopía) de manera muy cómoda, ya que el espacio entre el ojo y las gafas 3D ofrece espacio para esto. La sensación tridimensional pudo ser comprobada con éxito en películas de animación, donde se perciben con mayor claridad los distintos efectos de profundidad. La experiencia 3D fue más que satisfactoria.
Además de las películas, los deportes son uno de los principales contenidos que los usuarios desean consumir en su smart TV. Para ellos, Samsung incluyó el Modo Fútbol, una funcionalidad que tiene dos puntos destacables. Por un lado, modifica los colores de la pantalla saturándolos, por lo que el césped se verá con un brillo muy cercano al real, casi fosforescente; además de realzar los graves del audio, para percibir mejor los sonidos de la hinchada. Pero, también es posible grabar algunos fragmentos del partido para repetirlos cuando lo deseemos. Para ello, habrá que contar con un disco duro externo de al menos 40 GB que no posea archivos que nos interesen, pues el televisor le aplicará su propio formato, lo cual imposibilitará que se vean los videos grabados en otro dispositivo que no sea un televisor Samsung.
Para cerrar el capítulo de “extras”, dedicamos estos últimos párrafos al software general del equipo, con dos funciones que nos parecieron bastante cómodas y acertadas. Primero, el botón [Source], que permite cambiar las fuentes de contenidos (TV, HDMI, etc.) y, adicionalmente, ofrece un acceso directo especial para las carpetas que se hayan compartido en nuestra computadora o notebook conectada a la misma red. De todas formas, es posible usar el DNLA y el Wi-Fi Direct para “enviar” archivos a la TV.
El otro punto es la función [Historia], que muestra el historial de acciones que se realizaron con la tele, para poder volver a realizarlas. Es interesante que se puede retomar la reproducción de una película en el punto en la cual se dejó de ver, volver a un canal, regresar a la última aplicación abierta o hasta reabrir una aplicación en el último estado que se usó.
Conclusión
Sin dudas, estamos ante el SmarTV Full HD más completo del mercado. Además de una virtuosa pantalla de 55”, las aplicaciones y el 3D, este televisor ofrece dos formas de control que ningún otro modelo del mercado posee: por voz y por movimientos. El primero está muy aceitado y requiere del control remoto para usarse, pero el segundo es mucho más interesante y muestra una ventaja adicional: no requiere el control remoto, por lo que puede utilizarse tirado en el sofá y comiendo snacks sin el temor de tocarlo con las manos sucias, por ejemplo.
La inclusión del Modo Fútbol también es un punto a favor del televisor, al igual que la plataforma de software de Samsung, la cual está llamada a ser de las mejores del mercado. En este punto, además de la posibilidad de contar con un gran número de aplicaciones, tiene ciertos detalles que son valorados por los usuarios, como la funcionalidad [Historia], la facilidad para cambiar de fuentes de contenidos, etcétera.
Hay que apuntarle algunas cuestiones, que quizás no hagan mella en un televisor de tantas prestaciones, pero que deben señalarse igual porque se trata no sólo del SmartTV más completo en su gama, sino también del uno de los más caros. En primer lugar, la inclusión de 3D activo, cuyas gafas requieren pilas para funcionar, es una solución engorrosa y poco práctica, más teniendo en cuenta los modelos de otras marcas que consiguen iguales resultados con sistemas ópticos. También hay que criticar la falta de unificación en la sintonización de canales de cable y de aire; y la inclusión de tamaños de subtítulos muy pequeños. Y se podría incluir un control remoto tradicional para los usuarios que no están tan habituados a tratar con interfaces tan “avanzadas”.
Ficha Técnica
| Pantalla | 55” – 1920×1080 – 3D |
| Sonido | 40 watts RMS (2 parlantes de 10w., más 2 woofer de 10w.). Dolby sorround 5.1 |
| Conexiones de audio/video | 1 salida de sonido (Mini Jack) 1 video componente (Y / Pb / Pr) 2 video compuesto (AV) 1 salida de audio digital óptica 4 HDMI 2 RF (TV aire/Cable) |
| Otras conexiones | BluetoothEthernetWi-Fi (integrado) 3 puertos USB Infrarrojos |
| Extras | SmartHub Modo Fútbol Applicaciones All Share (DLNA) Navegador de Internet con PIP Manual de usuario en formato electrónico |
| Accesorios | Cámara Control remoto4 Gafas 3D |
| Dimensiones (con soporte) | 122,42 x 74,19 x 31,03 cm |
| Peso (con soporte) | 18,3 kg |
Ver ficha técnica completa en este vínculo.
A favor
+ Experiencia general
+ Variados e interesantes modos de control
+ Cantidad de funcionalidades disponibles
En contra
– El 3D es activo
– Tamaño de los subtítulos
Precio: AR$ 29.999 (US$ 3.689)
Puntaje
- Interfaz/Software: 10
- Funcionalidades: 10
- Diseño/construcción: 9
- Facilidad/comodidad de uso: 9
- Promedio: 9,5
Alejandro D´Agostino
RedUSERS Labs
