Samsung compró a su par japonesa Sony la totalidad de acciones que ésta última poseía en S-LCD, la sociedad conformada por ambas firmas en 2004 para la fabricación y desarrollo de pantallas con tecnología LCD.
Ésta adquisición por parte de Samsung se da poco después del anuncio hecho por Sony, donde reveló perdidas anuales por más de U$S1200millones. Ésta caída fue motivada por factores tales como la alza del Yen y el retroceso en la demanda de sus paneles.
El monto desembolsado por los coreanos habría sido de U$S939millones, que así pasan a fortalcer aún más su posición en el mercado de pantallas. Igualmente, para ver concretada la compra deberán esperar el visto bueno de los entes regulatorios, por lo que el acuerdo recién quedaría cerrado en los primeros meses de 2012.
Sony ha explicado que, a pesar de la compra, seguirá ligada a Samsung a través de un acuerdo que les permite un abastecimiento constante de paneles LCD a precios de mercado, exentos de la preocupación de manejar una planta de producción.