Samsung inicialmente esperaba despachar 320 millones de smartphones en 2018, estimación que llevó hasta los 350 millones cuando la serie Galaxy S9 tuvo una muy buena acogida en sus días tempranos, con un importante número de reservas. Ahora, un reporte del sitio The Investor indica que el fabricante de Corea del Sur enviará menos teléfonos de los que esperaba para este 2018.
¿Por qué 350 millones aparece ahora como una cifra demasiado optimista? Se apunta a un hecho fundamental y a una plaza determinada: las ventas de la serie Galaxy S9 no están marchando según lo previsto en China, un mercado clave en esta y muchas otras industrias. En vista de ello, citando a las clásicas fuentes desde The Investor dicen sencillamente que “es exagerado” pensar en 350 millones de unidades despachadas en 2018, incluyendo más móviles además de los S9.
Hay que recordar que en el primer trimestre del año Samsung vendió 78 millones de smartphones, cifra que caerá según se estima a los 73 millones en el segundo trimestre. Pensando en la segunda mitad del año hay que mencionar al Galaxy Note 9, que se presentará hacia agosto y que comenzará a influir en las estadísticas recién hacia los tres últimos meses del año. Además, analistas prevén que durante 2018 el fabricante envíe 30 millones de teléfonos Galaxy S, su peor cifra desde 2012, cuando lanzó el Galaxy S3.
En 2017 Samsung había enviado cerca de 320 millones de unidades, creciendo respecto de los poco más de 309 millones despachados en 2016. En 2015 había estado también cerca de los 320 millones.