Tras numerosos rumores, leaks y documentos que anticiparon la aparición de una nueva serie de smartphones de Samsung, el fabricante surcoreano presentó oficialmente los Galaxy C5 y Galaxy C7. Ambos llegan con cuerpo metálico y especificaciones propias de la gama media.
Por su parte, el Galaxy C5 llega con una pantalla AMOLED de 5.2 pulgadas con resolución de 1920 x 1080 píxeles. Su procesador es bien propio de la gama media, un Snapdragon 617, aunque cuenta con 4GB de RAM. En este punto, si bien muchos smartphones de alta gama cuentan con 4GB de RAM, de algún modo podemos señalar que aquella cifra comenzará a ser de gama media en vista a la posible llegada de teléfonos con 6GB u 8GB de RAM, tal como se rumorea para el Galaxy Note 6. Con un cuerpo delgado de 6.7 milímetros y un peso de 143 gramos, C5 cuenta además con 32GB nativos expandibles hasta 128GB vía microSD, lector de huellas dactilares, cámaras de 16MP y 8MP, batería de 2600mAh y Android 6.0 corriendo de fábrica.
El Galaxy C7 llega con una pantalla más extensa, en este caso de 5.7 pulgadas y Super Amoled, y mantiene la resolución de 1920 x 1080 píxeles. Su procesador es un Qualcomm Snapdragon 625 y se repiten los 4GB de RAM. En este caso se ofrecen variantes de 32GB y 64GB nativos, expandibles hasta 128GB. También dispone lector de huellas, cámaras de 16MP y 8MP. Llega corriendo con Android 6.0.1 y dispone de una batería de 3300mAh. Al igual que su compañero, su cuerpo es de 6.7 milímetros y en este caso pesa 165 gramos.
