La Web Foundation ha realizado un análisis basado en datos provistos por las Naciones Unidas y ha descubierto que el crecimiento de Internet ha sufrido una marcada caída. En 2007 la red crecía a un ritmo del 19% anual, pero durante 2017 este índice cayó a un 6%.
En 2014 las Naciones Unidas había pronosticado que para finales de 2017 la mitad de la población mundial tendría acceso a Internet. Este nuevo estudio supone que dicho objetivo será alcanzado en 2019.
El director de investigaciones de la fundación, Dhanaraj Thakur señaló: “Hemos subestimado la desaceleración en el crecimiento y ahora resulta preocupante. El problema con tener algunas personas online y otras no es que se agravan las desigualdades existentes”. En el reporte señala que a medida que la vida cotidiana tiene más componentes digitales, las poblaciones offline son empujadas con más fuerza a los márgenes de la sociedad. Los que no tienen conexión quedan afuera de mucha oportunidades económicas, debates públicos, opciones educativas, grupos sociales y una gran cantidad de servicios.
El encargado de la secretaría general de la Unión Internacional de Telecomunicaciones de la Naciones Unidas, Malcolm Johnson, afirmó que espera que la desaceleración continúe. “Algo diferente tiene que pasar para que cambie la tendencia. Necesitamos conexiones mucho más baratas, y más trabajo para en el contenido para atraer a las personas”, explicó.
Muchas áreas sin cobertura tienen un problema de acceso y costos. Esto provoca que las empresa de telecomunicaciones tengan poco interés en invertir en ellas. Pero el problema no es solo de conectividad, sino que en muchos casos no existe el conocimiento sobre los posibles beneficios del acceso.
La desaceleración ha afectado especialmente a las mujeres, que en las áreas pobres urbanas consiguen solo la mitad del acceso a Internet que los hombres. Otro grupo muy perjudicado son los pobres de las áreas rurales, sobre todo por la falta de acceso a la educación y oportunidades de negocios.
