La Hayabusa2 logró aterrizar con éxito en la superficie del asteroide Ryugu con el objetivo de recolectar muestras para ser evaluadas por los científicos en su retorno al planeta Tierra.
La sonda inició la aproximación el 21 de febrero a las 6 de la mañana hora de Japón. Durante ese periodo de tiempo se dedicó a tomar fotos del asteroide. Una vez en la superficie el Hayabusa2 hizo lo que cualquier aficionado podría esperar de una sonda japonesa: le disparó una bala al asteroide.
El impacto tuvo como objetivo generar una serie de fragmentos que la sonda fuera capaz de capturar.
Durante el tiempo en que la sonda estuvo en la superficie del asteroide los operadores en Tierra no tuvieron contacto con ella, por lo que debieron esperar a que despegara para retomar las comunicaciones.
La operación se realizó con éxito, aunque todavía no se ha confirmado si la sonda pudo capturar las muestras. El procedimiento originalmente estaba planeado para Octubre del 2018, pero la cantidad de grava en Ryuku hizo necesaria la realización de experimentos adicionales en un laboratorio.
El futuro
La Hayabusa2 dejará Ryugu en Diciembre de 2019 y debería volver a la Tierra luego un año. Por supuesto, antes de que esto suceda habrá otro disparo, en este caso con un explosivo, con el fin de obtener más (en caso de que el primer intento haya sido exitoso) fragmentos.
Las muestras recogidas tienen como objetivo verificar si existe la posibilidad de que los asteroides hayan sido los responsables de sembrar nuestro planeta con materia orgánica.