Después de años de idas y vueltas, T-Mobile y Sprint finalmente han confirmado su fusión. La firma comandada por John Legere pagará 26.500 millones de dólares por Sprint, lo que permitirá agrupar bajo un mismo techo a la tercera y a la cuarta operadora de telefonía móvil de Estados Unidos.
Esto, claramente, les permitirá competir de forma directa con los dos operadores más grandes de ese mercado, Verizon y AT&T, que actualmente ostentan el puesto número 1 y 2, respectivamente. La nueva firma conservará el nombre T-Mobile y su CEO será Legere.
Cada acción de Sprint se convertirá en 0.10256 acción de T-Mobile. Según el cierre del viernes de T-Mobile en la bolsa de valores, la transacción valora a Sprint a US$ 6.62 por acción. Deutche Telekom poseerá el 42% de la compañía combinada, mientras que SoftBank tendrá el 27%. El 31% restante permanecerá en manos públicas.
“Esta unión creará un competidor feroz con la escala de red para ofrecer más a los consumidores y las empresas en forma de precios más bajos, más innovación y una experiencia de red insuperable, y hacerlo todo mucho más rápido de lo que cualquiera de las compañías podría por su cuenta. ” aseguró John Legere, presidente y CEO de T-Mobile.
T-Mobile / Sprint tuvo US$ 74 mil millones en ingresos anuales combinados el año pasado. Verizon Wireless tuvo US$ 88 mil millones en ingresos durante 2017, mientras que AT & T registró US$ 71 mil millones en ingresos durante el mismo período de tiempo. En cuanto a la cantidad de suscriptores, AT&T aún estaría por delante de T-Mobile / Sprint combinado. Al final del cuarto trimestre del año pasado, Verizon tenía 150 millones de suscriptores seguidos por los 141 millones de AT&T. El combinado de T-Mobile / Sprint habría tenido 126 millones de clientes a fines de 2017.
Vale aclarar que el siguiente paso es obtener la aprobación regulatoria para la transacción y no será fácil. Fuera del hecho de que John Legere y Donald Trump tuvieron un altercado digital hace unos años, la FCC y el Departamento de Justicia pusieron se han interpuesto en varias ocasiones a las conversaciones entre ambas compañías. El año pasado, T-Mobile y Sprint completaron las líneas de un acuerdo antes de que el presidente de SoftBank supuestamente decidiera cancelar el trato. El ejecutivo supuestamente no estaba contento con el porcentaje de propiedad que le quedaría a SoftBank.