Si buscamos transformar Ubuntu en el clásico Windows 7, también es posible realizarlo. Para esto debemos recurrir al sitio Gnome Look y descargar el tema Windows 7 .
Una vez descargado su contenido, lo instalamos en el perfil del usuario Linux, dentro de la carpeta .themes. Luego debemos ingresar a [Ubuntu Tweak/Ajustes], a la opción [Temas], y desde allí seleccionar:
-Tema GTK: Win7
– Tema de íconos: Win7-icons
– Tema de cursor: Handheld
– Tema de ventanas: Win7
Ahora debemos ocuparnos de la barra de inicio Cairo Dock. Haremos unas pequeñas modificaciones a las propiedades de esta barra, para que se asimile a la barra de tareas de Windows. Hacemos clic con el botón derecho del mouse sobre ella y elegimos del menú [Cairo Dock/Configurar]. Luego vamos a la pestaña [Aspecto] y establecemos los siguientes parámetros: [Elegir un tema de íconos: Win2-7 6.0], [Tamaño de los íconos: Mediano].
Ahora pasamos al modo [Avanzado/Fondo], la opción [Aspecto], para poder configurar la barra de tareas de modo que quede lo más similar posible a la de Windows. En el primer ítem indicamos: Llenar el fondo con: Gradiente de Color. Luego, ajustamos el Color de brillo y Color oscuro, con el color Azul de Windows 7.
Lo siguiente es establecer Ancho de la línea externa y Radio de la línea externa en 1.
Finalizada la configuración, presionamos el botón [Aplicar] y cerramos la ventana de configuración de Cairo Dock. Ya hemos finalizado los ajustes pertinentes, y ahora nuestra distribución Linux lucirá como Windows 7. El fondo de pantalla de Windows puede descargarse desde Internet, ya sea el original o cualquier otro que les guste.