La aplicación de Twitter para Android y iOS ha sufrido un pequeño cambio en el modo en que aplica filtros a las fotografías. El viejo sistema ha sido reemplazado por uno similar al que encontramos en Instagram. La aplicación agrupa los controles de estos efectos en una fila que podemos navegar. Cada efecto puede establecerse en la intensidad deseada a través de un deslizante.
El sistema antiguo había sido desarrollado en 2012. La pantalla se dividía en 9 pequeños recuadros que mostraban como quedaba la imagen al aplicarse cada uno de los filtros. El diseño implicaba que para una mejor comparación era necesario realizar un zoom sobre uno de los recuadros y luego moverse por la pantalla. El nuevo sistema ha sido calificado como una copia del que tiene Instagram. Lo cierto es que el diseño es efectivo y en ocasiones tiene mucho más sentido copiar lo que está bien hecho que producir algo innovador y de mala calidad. Por supuesto, siempre se puede crear algo nuevo y de buena calidad.
Detrás de esta modificación se encuentra sin duda la fuerza que ha adquirido la publicación de material fotográfico en las redes sociales. En particular, se ha notado que el nivel de atracción que genera este tipo de contenido es mucho más fuerte que el del contenido de texto en servicios como Facebook o Twitter. Convertir a Twitter en un espacio mejor adaptado para subir fotografías podría ser clave para impulsar su popularidad en momentos en los que parece haber experimentado un pequeño declive en su crecimiento.
Fuentes: Techcrunch, Thenextweb
