Al parece Elon Musk no ha renunciado como director de Tesla ni está distribuyendo bitcoins entre sus seguidores de Twitter. Esto puede resultar sorprendente para los miles de usuarios del servicio que vieron como desde una cuenta verificada se realizaban ambos anuncios. Salvo que no era la cuenta de Elon Musk.
Varias cuentas verificadas fueron hackeadas y manipuladas para presentarse como pertenecientes al empresario. Luego se publicaron los mensajes a través del sistema de tuits promocionados para alcanzar a la mayor cantidad de internautas posibles.
Todo esto era parte de una gran estafa. Los enlaces en los mensajes llevaban a una página en la que, supuestamente, luego de enviar de 0,1 a 1 bitcoin se recibía de 1 a 10 unidades de esa misma criptomoneda.
Para hacer más creíble la escena muchas de las cuentas hackeadas fueron utilizadas para mandar mensajes de confirmación. Es decir, que realmente parecía que había gente conocida que había conseguido sus bitcoins.
Lamentablemente Elon Musk no estaba regalando dinero. Como resultado el único que obtuvo bitcoins gratis fue el estafador, aunque no hay datos sobre los valores que circularon en esta operación.
La elección de la imagen Elon Musk como fachada para la estafa no parece casual. El empresario es conocido por su comportamiento excéntrico. Es muy probable que cualquiera haya sido el éxito de esta maniobra hubiera sido mucho menor si se la hubiera presentado como viniendo de parte de Bill Gates o Tim Cook.