En las últimas tres semanas Zoom aumentó su base de usuarios un 50% y alcanzó los 300 millones.
Las cuarentenas impuestas en todo el mundo, la necesidad de contactarse con amigos y familiares así como el teletrabajo le han dado a la compañía una oportunidad única. Sin embargo el servicio también ha recibido grandes críticas por sus fallas de seguridad.
El miércoles su jefe ejecutivo, Eric Yuan, presentó un plan de seguridad a 90 día y adelantó que una nueva versión será lanzada pronto. Esta iteración contará con opciones de encriptado adicionales.
Mala prensa
Recientemente la automotriz alemana Daimler confirmó que había prohibido el uso de Zoom para cualquier comunicación que involucrara información corporativa. Según la compañía la herramienta no cumple con los requisitos de seguridad necesarios.
Algo similar ha sucedido con la firma de tecnología inalámbrica NXP, y Ericsson. Estas firmas se han unido a una larga lista, que incluye SpaceX, Microsoft (que después de todo tiene una solución propia), varios bancos, gobiernos, e incluso escuelas.
Sin embargo, al menos por el momento, parece que la publicidad negativa no ha impuesto un freno a la popularidad de Zoom.
Zoombombing
Cuando un problema de seguridad lleva tu nombre tienes un gran problema. Los incidentes de usuarios ingresando a conversaciones privadas a las que no habían sido invitados han creado el termino zoombombing.
La compañía ha decidido darle a los creadores de los encuentros más herramientas para controlar el espacio creado.
Sin embargo para las empresas los problemas exceden estos incidentes, e incluyen cuestiones tales como quienes se quedan con las grabaciones y que tan bueno es el sistema de encriptado.